sábado, 13 de febrero de 2010

El secreto


Hoy me he despertado sabiendo la vida corta
que no es lo mismo que eso que la gente siempre dice
sino además creyéndolo;
que han pasado seis años desde aquello
cuatro desde lo otro
y muchos desde el colegio.
Que los niños han de ser felices
ésa es la única norma
quizá si se cumple un día el mundo chorree menos mierda
y complete su órbita con adultos más dignos:
mi hija no debe notar a su madre asustada
ni sospechar siquiera que las puntas de los dedos
están azules de frío conectadas
por un polo negativo
a la parte complicada del espíritu
donde se enreda el recuerdo.
Mi hija no ha de saber que la mañana
es una luz preciosa que ya no me anuncia nada
la cortina de damasco y terciopelo que se abre
sobre un escenario vacío;
en primera fila o más atrás
eso qué importa
yo soy una que se quedó esperando
a que saliera su actor favorito
y de entre todas la eligiera por auténtica .
No por neumática , no;
no por princesa.
No por cocinera , lista o guapa,
ni rastrera;por auténtica .
Pero no ha sido así ,
me dijo el manager
que el mundo es una jungla de madera
pero me lo dijo tarde
como ese beso de una copla
ya no me acuerdo
también pude ser una ramera
que suspirara por un hombre casado
mientras peinaba sus rizos de azabache.
No lo sé,
sólo me ajusto
a las reglas de mierda del dios Mierda
a quien no culpo de todos mis errores
faltaría más
yo me hice mi condena
apunté las entradas y salidas
configuré el mapa de mis penas
nadie ha venido
a preguntar por mí
cayó el telón
y ya soy otra
he perdido aquella boca prisionera
aquella boca roja del pasado
que decía palabras que hoy día
ya no serían adecuadas en mi lengua
demasiado mayor para según qué cosas
y aun así no pasa nada.
Mañana no me acordaré de las verdades
ni me haré calcetines de tristeza
ya no camino el dolor como deporte
porque ella no puede saber nada
las madres somos cajas de secretos
que disimulan el peso que ahí se guarda
para que el mundo siga siendo una aventura .

11 comentarios:

añil dijo...

Ahora, a mis años, cuando pienso en mi madre y su papel en la familia no puedo dejar de ver un gran colchón de plumas que amortiguaba todo cuanto se acercaba a sus polluelos. Una especie de filtro con los agujeros muy, muy pequeños que hasta el agua le parecía gruesa para permitirle el paso.
Hay que tener hijos para entender esto?

Besos, linda.

Araceli Esteves dijo...

Eso de tejerse calcetines de tristeza me ha llegado al alma. Y lo de configurar el mapa de tus penas... Calla, hija, calla, que hoy es domingo. Bueno, es una forma de hablar; de callar nada.

virgi dijo...

¡Qué ternura que destilas!
Te devuelvo un trocito con un fuerte abrazo

trinidad dijo...

¿ Sabes una cosa Reyes ? , fuí madre muy joven , pero un día mi hijo de 21 años me dijo que recordaba con alegría su infancia porque nunca les faltaba de nada . Me quedé perpleja , no recordaba los dias en los que sólo había para comer pan duro con manteca , o cuando iban con tenis rotos al colegio porque no tenia dinero para comprarles otros ... deduje que no lo había echo tan mal . Siempre les he dado mucho amor a mis hijos , todos los días les sigo demostrando mi amor , y parece que eso es lo que más recuerdan cuando se hacen mayores : el trato que recibieron y el amor que le brindan sus padres . Así que sigue así , dándole y demostrándole amor a tu hija ... que lo estás haciendo muy bien . Besos preciosa

Fran dijo...

Todo eso que cuentas en un poema que te tiembla entre los dedos, es hermoso sobre todo porque eres una mujer culta, culta ya que el dolor eleva la cultura de uno, le hace saber de historia sin haber leído ningún libro de historia, de filosofía como si la filosofía tuviera algún sitio en su vida.

Tu poema es hermoso porque tienes la fortuna y la desgracia de ser mujer y haber sido madre y será preciso que tu hija te ame siempre.

Está impregnado cada verso del dolor y de la hermosura que tiene la tristeza. Leyéndote, de ti siempre me acuerdo, he llegado a meter algún verso en la hermosa memoria que tenemos los viejos.

Un beso

iliamehoy dijo...

Eso dicen que es la vida, perra, triste, con enormes sacrificos que no siempre se justifican con las etéreas alegrías con las que se nos alimenta.
Deberemos seguir creyendo que eso, "vale la pena".
Una sonrisa

Anónimo dijo...

Pues ya sabes, menos mariconadas y al tajo, que las penas se quitan sudando y currando, aunque sea mentalmente.

Y te lo digo de corazón, restregarse hasta la saciedad en el pozo de nuestra propia mierda no arregla nada y te deja la ropa hecha un asquito...

Animo.

Dol dijo...

AÑIL
parece que sí, que sólo se entiende cuando se tiene hijos, así es la cosa.
Un beso.
ARACELI
jajaj...ya sabes, no me callo ni debajo del agua...sea domingo o lunes o viernes santo.
Gracias, VIRGI, la compartiremos por aquí.
La ternura , digo, que no sobra.
IRIS
felicidades por haber conseguido eso, es lo más difícil , no te creas que mi hija dirá eso el día de mañana , si lo consiguiera me sentiría bastante feliz.Pero a veces me vengo abajo, no soy demasiado ...alegre.
Aunque al menos intento disimular .
Un besazo.
FRAN
gracias por tu comentario ,repleto de elogios sólo por ser la que soy ,cosas que sólo tú que me conoces bien puedes decir,en fin ... como me dijiste que dijo Rilke, RESISTIR .
Es lo que toca.
Un beso grande ,grande.
ILIAME
sólo son momentos , ya sabes, la montaña rusa...
todo pasa.
Un beso, guapa.
VICENT
tienes toda la razón, al tajo, al tajo .
La resistencia ya es un regalo por sí misma, pero a veces me siento de mantequilla.
Un beso.
GRACIAS A TODOS Y TODAS.

Isabel dijo...

Me alegro mucho de que no camines el dolor como deporte, hay otros más sanos que dan más energía de la buena.

Abrazos

Dol dijo...

ISABEL , es verdad , el dolor como deporte es tan ingrato como el amor como deporte.
Jaja.
Un beso.

MUY SEÑORES MÍOS dijo...

Te equivocas, Reyes: cada día triunfas, por ser como eres; eso es lo que debería de saber tu niña... y tú de paso. No te quejes tanto en un mundo tan escaso.

Besos a rabiar.

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