miércoles, 14 de marzo de 2012

Natación correctora

Yo diría que es flamilla lo que entra por la ventana,como un aliento de verano,y que mi tensión baja es lo que provoca esta flojera;yo diría que no es muy normal que en dos semanas el dolor de rodillas por frío esté dando paso a este par de cojones aplatanados por los sesenta grados dentro del coche y diría que tales cambios no deben ser buenos para la salud;si la naturaleza propia se muestra así de desequilibrada ( o será que esto es así?que la vida no cambia gradual,suavemente,sino igual que el clima,al puro trancazo)qué podemos esperar nosotros,los bailarines.
Ayer saqué de internet la siguiente definición de escoliosis;procede del griego skoliosis ,(torcido),y no es un problema primario de huesos ni articulaciones,sino el resultado de una disfunción digamos,cerebral,con respecto a lo que nuestro órgano supremo considera EQUILIBRIO;o sea, es el cerebro el que "decide" si la columna ha de ser recta o tuneada:me dio que pensar como cada vez que oigo algo acerca de cocimientos cerebrales con un reflejo clarísimo,demoledor en el cuerpo físico.
Casi tan demoledor como acudir por primera vez a una sesión de natación terapéutica en un centro de hidroterapia;porque te colocas el bañador de Decathlon más cutre que tienes,ése que parece una bolsa de nylon negra,y piensas que nadie se va a fijar en ti,total ,vas a un sitio donde dos o tres señoras mayores atenderán las indicaciones de un monitor situado en un bordillo del extrarradio de la ciudad;pero luego resulta que ocurre todo lo contrario.
Te encuentras un grupo bastante animado,todas mujeres menos un hombre,y aunque se les nota el caserío y el morro cachondón,no es fácil pasar desapercibida.
Ya se sabe la resistencia de las seres humanas,entre las que me cuento,para superar dificultades y pruebas;desfilar con un bañador dos tallas más pequeño con una toallita azul en el hombro , a modo de gualdrapa, mientras atraviesas un pabellón recorriendo largos pasillos por los que continuamente se cruzan hombres en bañador,sin resbalar en los charcos que se forman en el suelo, no es fácil,sobre todo cuando esperabas salir de un vestuario y rodar haciendo la croqueta unos 34 centímetros a lo sumo para meterte en el agua rapidito con el resto de señoras.
Lo que ocurre es que el trayecto es largo y que no sabes para dónde mirar , no precisamente con el atuendo más atractivo,(ese gorro de Karhu te ha convertido hace rato en un Bic azul de gran tonelaje con su capuchón puesto,capirotillo incluido,que una lleva el pelo largo y en algún sitio hay que meterlo)y cuando llegas al final aún no hay nadie de tu grupo.
La tensión mandibular ha llegado al grado de bruxismo cuando aparecen las mujeres exclamando "Aquí está la nueva,aquí está" y se hacen las presentaciones con el fisio,que es un chico joven que nos indica extender las esterillas.
Qué esterilla;pues una de ésas de color para revolcarse en pos de la vida sana;la única señora mayor y yo somos las Sin Estera, así que entrenamos de pie.(ya sin gualdrapa,recuérdese).
Obedezco a JL, que es muy amable y parece curado de espanto;levanto los brazos,giro las muñecas ,los tobillos...al mirar abajo me parece ver un sendero oscuro cerca de la ingle derecha;claro,este bañador no es para lucirse bajo los fluorescentes,y yo ni pensé repasar el césped,no me pareció necesario;tampoco es que asomen unas trenzas cherokees,como alguien me ha sugerido desbordante de imaginación ,pero juraría que al menos dos o tres pelos montaban guardia ahí mismo,delante del fisio.
La tensión empieza a golpearme las sienes,casi tanto como aquella vez que en plena sesión de Pilates descubrí un agujero en el calcetín y en vez de estirarme me encogía como las cochinillas que se hacen bola.
Hay que ver.Se suponía que iba a relajar la espalda y lo que hay alredededor,pero cuando empieza la clase yo rezumo estrés por cada poro,reflejada en todos los cristales del pabellón.
Cuando por fin nos metemos en el agua no me importa quedarme sin churro,no quiero juguetes ni ejercicios ni nada,quiero estar en mi casa tranquila destrozándome la chepa delante del ordenador,como todas las tardes de mi vida en los últimos cuatro años;Jl me consigue uno enseguida(con los nervios siempre hago una cosa;hablar mucho;creo que a fuerza de preguntarle cosas aparentando normalidad le he caído bien, o es que el tío se parte porque se me nota como de 13 años en un cuerpo de adulta sobrealimentada;además soy una gorda bien hecha,ya está,lo dije).
Y bien...a los pocos minutos de chapotear y sufrir las ostias del agua (chorros,etc)empiezo a reírme de mí.
Juego como una foca en un acuario muy confortable,no respeto el circuito,la señora mayor me dice que qué estoy haciendo;el fisio dijo diez minutos en cada actividad (no debí oírlo,estaba OFF pensando en mis pelos); yo estoy haciendo lo que me sale del alma, farfullo feliz;del chorro a la playa y luego al jacuzzi;la señora no sabe que sólo un rato antes yo estaba teniendo unas ideas muy tristes sobre la miseria de la carne humana,(los campos de exterminio y hospitales incluidos),esto me pasa cada vez que me desnudo en un sitio público.
Bah.
De repente me empiezo a reír a nivel interior.
Podría ser muy divertida escribiendo sobre ello en plan occidental,estilo Bridget Jones,pero sin cigarrillos;en el fondo muy acomplejada y muy histriónica.
Sin embargo no soy más que una pescadilla en un mar lleno de peces.
No soy nada y me creo todo.
Empiezo a pensar cómo lo contaré en este blog ,eso también me hace reír;paso el resto de la clase sintiendo la presión de los chorros por todas partes,sabiendo que si entreno lo suficiente conseguiré salir del circuito lo suficientemente relajada como para olvidar que nunca en mi vida,ni siquiera antes del nacimiento o cuando comenzaba a ser mujer,he conseguido conocer eso que dicen que existe en la naturaleza y que se conoce como EQUILIBRIO.
(En la foto aparezco después de la sesión,relajada ya.
Gracias por todos vuestros comentarios en la entrada anterior).

15 comentarios:

BB dijo...

No he parado de reirme un solo segundo, Reyes. Eres única, querida amiga.
Besos
BB

Nieves Martín dijo...

Es que las clases de natación pueden resultar una aventura, yo soy de las que escucha esos comentarios de las compis, el primer día siempre tengo ese toque tímido.


Que risas leyéndote!!!!

Besitos :)

trinidad dijo...

En la foto se te vé divina, si me garantizan que me quedo igual después de una sesión de natación, me apunto mañana mismo. Tu historia me ha recordado a mi cuando me apunté a clases de danza del vientre, sólo estaba pendiente a mi cuerpo...con su barriguita y todo lo demás, al lado de chicas espectaculares que se movían como Shakira. Besos guapa y disfruta del agua.

mariajesusparadela dijo...

Pues sí que se te ve relajada después de la sesión.

Trini Reina dijo...

Ay, Reyes, qué arte, miarma:):)

Y eso que me has puesto mal cuerpo hablando de la escoliosis, a cuyo club pertenezco y que. hasta ahora no me he enterado de que la culpa no es de no beber leche de pequeña, sino del equilibrio:(
O sea, que también será por eso lo de mis problemas de psicomotriz (según mi hija)y mi pésimo sentido de la orientación (según hasta Dios).
Menos mal que luego me he hartado de reír imaginándote. Y como te conozco, sé que has exagerado, como buena Sevillana.
Sabes, te "envidio" al menos tú sabes nadar:)

Besos

Genín dijo...

jajaja Total por tres inocentes pelillos de nada...
Pero una vez que te relajaste mira oye, lo bien que quedaste!
Besos y salud

Sue dijo...

Marditos pelos. Quién se inventaría lo de la depilación. Grr!


Besos.

Francisco Espada dijo...

Nos encontramos en una situación bastante similar, sólo que yo pertenezco al grupo minoritario y, por tanto, posiblemente más observado. Pero todo eso es poco rédito para los beneficios que se logran en la piscina. ¡Buenos días, sirenita!

añil dijo...

No veas cómo te ha sentado el baño.
Me has recordado mi primera experiencia en la piscina cubierta de mi pueblo. Toda una aventura.

Un beso

manolotel dijo...

Las primeras veces siempre son una curiosa experiencia.

A la luz de este post, la Bridget no tiene tanta gracia.

En cuanto a esas otras "contadas" preocupaciones, ¡pelillos a la mar! Perdón. Quería decir que ¡quien se va a enterar!... Bueno, que no tiene importancia.

La foto de después, no sé porqué, me resulta conocida... creo que la he visto dentro de un marco de fotografía que me vendieron en el mercadillo de los viernes (aquí es los viernes) :-).

Un besote.

Adolfo Martínez, Terapéuta Gestalt. dijo...

He trabajado mucho tiempo en piscinas y cuando se llega a esa risa interior, es un regalazo para todxs. Gracias.

Isabel dijo...

Jajaja, te comprendo perfectamente.

Muy bueno.

Abrazos.

Elysa dijo...

Ya veo que te ha sentado de maravilla. y a mí también tu post, lo que me he podido reír y no me ha costado nada imaginarmelo,me he visto en alguna situación parecida, jajaja.

Besitos

NáN dijo...

Cuánto tiempo sin vernos, ¿eh? También yo pasé por la piscina terapéutica, calentita y tal, y me lo pasaba estupendamente. Pero como lo que tenía era una fractura vertebral, me hacía el mismo bien que chupachús de menta para una infección de muelas.

Me gusta que te sigas riendo de ti misma y no te comento el más nuevo porque es de amor y el cardiólogo me ha prohibido esos temas.

Besos

Larisa dijo...

¿Por qué has puesto una foto mía sin pedirme permiso?

Despedida

Creo que abrí este blog en el año 2009, y hoy decido que lo cierro,once años después;no deja de ser una friolera, teniendo en cuenta la gent...